domingo, octubre 08, 2006

Emergeré del colector.


Llevo demasiado tiempo perdido entre colectores mefíticos. Aunque planifiqué mi huida minuciosamente, me arrastro por este albañal repugnante. Llego al fin, a una salida que posiblemente pueda traspasar. La reja no será impedimento, o eso creo. Fugarme llevando como único equipaje un abrigo viejo y una maleta llena con las hormigas que me ayudaron a tunelar la celda resulta arriesgado, pero, no había opciones; y no tuve valor para abandonar a su suerte a estos simpáticos insectos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Estás loco, tío.